El Libro IX de las Etimologias trata "de las lenguas, pueblos, reinos, milicia, ciudades y parentescos". Estamos pues en el libro IX, el dedicado propiamente a hablar del hombre afrontado desde todas sus formas de relación: la comunidad de lengua, la comunidad de nación, la comunidad resultante de la relación del dominador con el dominado, la comunidad de la milicia, la comunidad cívica y la comunidad familiar en su máxima extensión. (Mariano Arnal, en www.libroesoterico.com, ETIMOLOGIAS - selección ). En este Libro es posible encontrar unos principios de pedagogía política, aspecto que no aparece de forma evidente en las Etimologías. Es decir, no hay un Libro dedicado total o parcialmente al mismo, pero en el Libro V ya encontramos apartados dedicados a la ley con un claro sentido pedagógico (apartado 21). Pero en el Libro IX que nos ocupa, en el apartado 9.3.4 se indica más claramente que Rey deriva de regir, y no rige el que no corrige. El nombre de rey se posee cuando se obra rectamente y se pierde cuando se obra mal (proverbio original de Horacio). Y en el apartado 9.3.5 se expresa que las virtudes regias son principalmente dos: la justicia y la piedad. No obstante, suele alabarse más la piedad pues la justicia, por su propia esencia, es severa. La intención didáctica y pedagógica de San Isidoro en estos casos es clara: la ley debe orientarse al bien común, el rey lo es si obra rectamente -regir y corregir- y la justicia y la piedad serán las principales virtudes regias. Estos principios serán recogidos, siglos después, por los tratados de educación de príncipes, como sería el caso de Educación del príncipe cristiano, obra dedicada a la formación del príncipe Don Carlos, luego Carlos V, de Erasmo de Rotterdam (1516) o Empresas Políticas, obra de 1640 dedicada a la formación del príncipe Baltasar Carlos, de Saavedra Fajardo. (Francisco Javier Santaló de los Ríos, en "Política y pedagogía en San Isidoro", ponencia desarrollada en Alcalá la Real, octubre 2014). |
Scriptorium Isidori Hispalensis